15 Cosas inútiles y ridículamente caras que han comprado los famosos

Aunque comprar grillz (un accesorio decorativo para los dientes) no es nuevo en el mundo de Hollywood, es algo que todavía no es muy habitual. Pero Justin Bieber llegó a comprar un grillz de oro para un disfraz de Halloween pagando 5.000 dólares por él. Para hacerse la pieza blingy, Bieber contrató a Ben Baller de la empresa de joyería If & Co. Y sí, ocurrió en 2013, cuando aún era un niño. Si alguna vez te has preguntado por qué las estrellas infantiles gastan tanto dinero, pues compran cosas como ésta.

Con un patrimonio neto de 160 millones de dólares, gastarse 24.000 en extensiones de pelo no parece mucho, ¿verdad? Cuando Miley tenía 17 años, solía lucir extensiones constantemente. Sus fans más acérrimos saben que se gastaba mucho dinero en extensiones. Sus mechones falsos de 24.000 dólares, los de mayor calidad, llegaron por avión desde Italia. Expertos tiñeron las extensiones para asegurarse de que combinaban con su pelo.

El patrimonio neto de Daniel Radcliffe es de aproximadamente 110 millones de dólares y parece que no ha querido comprometer su sueño. La estrella de Harry Potter se gastó 17.000 dólares en algo que a la mayoría de la gente le puede parecer innecesario. Por supuesto, un colchón es un artículo doméstico esencial, pero gastarse tanto dinero es un poco innecesario, ¿no crees? De todos modos, el famoso es rico y no se lo pensó dos veces a la hora de comprar un colchón supersuave para descansar y dormir bien.

Kesha ha conseguido muchos fans en todo el mundo. Según la cantante pop, solía gastar miles de dólares al mes en purpurina. Dado que un pequeño frasco de purpurina cuesta alrededor de 1 dólar, parece que gastaba mucha... mucha purpurina. Pero parece que la mayor parte se la gastaba en su espectáculo en directo, en el que se llenaba el cuerpo de purpurina tras salir disparada de unos cañones. Lo contó en una entrevista en 2011 y estamos bastante seguros de que aún tiene restos de esa purpurina en algún lugar de su casa.

Con el patrimonio neto de 350 millones de dólares de Kim Kardashian y los 1.300 millones de Kayne West, no hay nada malo en ir al baño con estilo. Por eso, ambos decidieron adquirir inodoros de oro por 750.000 $ tras comprar su mansión de Bel Air. Al fin y al cabo, querían lo mejor en toda su mansión. Hay rumores de que la pareja incluso decidió gastarse el doble de lo que costaba la casa en la decoración interior de lujo. Eso explica por qué casi se gastaron 1 millón de dólares sólo en su cuarto de baño.

Después de leer que Bono se gastó tanto dinero en el billete de avión de su sombrero, estarás como "¿espera qué?". Así es exactamente como nos sentimos nosotros también. Era 2003 y Bono estaba en Italia para actuar y se dio cuenta de que se había dejado su sombrero característico en Londres. En lugar de comprar un sombrero nuevo o utilizar cualquier servicio de mensajería para recuperarlo, optó por una opción mucho mejor. Le llevó el sombrero en avión en primera clase. Se gastó más de 1.500 dólares sólo para poder tener su sombrero con él antes del concierto.

El iPhone 4 fue, sin duda, una de las cosas más calientes del mercado en 2011. Fue entonces cuando Post Spice tuvo un teléfono chapado en oro de 24 quilates realmente elegante. El diseñador Stuart Hughes hizo el teléfono a medida y tenía 150 gramos de oro de 24 quilates. Victoria pagó 33.000 $ por esa carcasa. Podemos imaginar que el teléfono se habría vuelto pesado de llevar, porque ahora se ha deshecho de él.

Celine Dion empezó a vivir en Las Vegas en 2002 y pensó que, si iba a actuar en la misma habitación todas las noches, necesitaba un alojamiento especial. Por lo tanto, decidió comprar un humidificador de 2 millones de dólares para combatir el clima seco del desierto y proteger su voz de cantante. Podrías decir que un simple humidificador habría hecho fácilmente el trabajo, pero la cantante no estaría de acuerdo contigo. El carísimo humidificador colgaba del techo por encima de ella mientras cantaba con su potente voz. ¿Crees que fue una compra absurda?

Cuando Johnny Depp puede gastarse más de 30.000 $ al mes sólo en vino, también puede comprarse una isla privada. Sin embargo, compró la isla antes de estar en déficit. Compró un cayo Little Halls Pond en Bahamas por 3,6 millones de dólares en 2004. Johnny siempre ha sido un gran derrochador y ésta tampoco es diferente. La hermosa isla privada ofrece 45 acres de privacidad al actor. Además de una isla privada, también posee más de una docena de casas.

Nuestra lista estaría incompleta sin Trump y sus extravagantes compras de famosos. El Presidente de Estados Unidos es conocido por su lujoso estilo de vida. En 2011, compró un Boeing 757 a Paul Allen (cofundador de Microsoft) por 100 millones de dólares. Trump se aseguró de que el jet tuviera todas las comodidades de una casa y además la mayoría de las cosas están chapadas en oro de 24 quilates. Dado que ahora el presidente Trump utiliza el Air Force One, su hermoso jet debe de estar guardado en algún hangar.

Cuando Mike Tyson estaba en la cima de su carrera boxística, gastaba tanto dinero que era como si lo diera gratis. La cosa cambió tras su condena por violación. Antes de eso, compró una bañera de oro de 24 quilates para su ahora ex mujer Robin Givens. Es una compra descabellada porque pagó más de 2,2 millones de dólares sólo por una bañera. Ahora que Tyson y Givens ya no están casados, ¿quién se quedó con la bañera?

He aquí una compra súper excéntrica de una famosa. Gaga se toma muy en serio lo de mantener alejados a los malos espíritus de su casa. ¿No te lo puedes creer? Pues la cantante se gastó 50.000 dólares en cazafantasmas e incluso en un medidor de campo electromagnético para detectar espíritus. Quizás, ganar demasiado dinero puede hacer que gastes algo en tonterías.

Hubo un tiempo en que Nicholas Cage se enzarzó en una guerra de pujas con Leonardo DiCaprio por la compra más guay de un famoso de todos los tiempos: se trataba del cráneo de un Tiranosaurio Bataar. Cage lo compró en la subasta por 276.000 dólares y lo conservó durante muchos años antes de que ocurriera algo realmente extraño. En 2015, se informó de que el cráneo nunca estuvo destinado a la venta, ya que fue robado. Aunque el actor pagó mucho dinero por él, accedió a entregar el cráneo para que pudiera ser devuelto a Mongolia.

Mike Tyson siempre iba a aparecer de nuevo en nuestra lista. Y aquí vuelve con fuerza. Compró tres tigres de Bengala por 140.000 dólares. Es una compra ridícula porque comprarlos cuesta menos que el coste total de alimentarlos y mantenerlos en una casa separada. Por ejemplo, la comida de los tigres cuesta 200.000 $ al año. Antes de renunciar definitivamente a sus gatos, los hizo debutar en el cine en Resacón.

Kim Basinger es natural de Georgia y fue en 1989 cuando decidió que quería poseer un trozo de su estado natal. Así que reunió a unos cuantos inversores y se gastó 20 millones de dólares en 1.751 acres de Braselton, Georgia. Aunque las intenciones iniciales eran convertirlo en un destino turístico, no fue así y tuvieron que vender la propiedad al cabo de cinco años, con pérdidas. Desde luego, no fue una sabia compra de famosos.